La vida la recorre con la actitud de no detenerse jamás. Que lo que pase, siga.
Que lo que es, suceda. Ella transluce lo que va sucediendo, por eso nada la atrapa.
No rechaza nada porque de nada se siente enemiga. Puede vivir en
cualquier forma, pero sólo la forma adecuada puede vivir en alla. Siempre tiene
opciones, porque entiende que todas son válidas. Sabe que todo lo que encuentra,
lo andaba buscando. No encuentra el amor porque ella misma es el amor. Como no
conoce la culpa, no es prisionera de nadie. Es un canto de libertad que
traspasa cualquier reja que quiera silenciarla. No le interesa la velocidad
de la luz, sino la luz viajando. Es nadie, es el cero que iluminado se convierte en lucero.
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